Las danzas flamenca y contemporánea: una fructífera historia de amor

El flamenco, arraigado en una rica tradición cultural de España, es un género musical y artístico que trasciende el tiempo. Con sus raíces en la fusión de diversas culturas, ha evolucionado a lo largo de los siglos hasta la época actual para abrazar otras tradiciones y propuestas contemporáneas.

De esta forma, la vibrante intensidad del flamenco y la libertad expresiva de la danza contemporánea se entrelazan en un diálogo apasionante, creando nuevos y únicos paisajes artísticos. Estamos ante una convergencia que no solo enriquece la danza, sino que también rompe barreras, trascendiendo las limitaciones temporales y culturales para crear una experiencia emocionalmente cautivadora y estéticamente impactante.

El Festival Internacional de Danza de Itálica no es ajeno a este fenómeno, por lo que hoy queremos rememorar algunas de las audaces propuestas en las que la danza flamenca abrazaró temáticas, estéticas y artistas contemporáneos.

Doce tiempos» de Axel en Petit Comité (2015)

El espectáculo unió estilos y expresiones bajo la dirección del violinista Bruno Axel con la participación del chelista Sancho Almendral. Sobre el escenario, la coreografía de Patricia Guerrero y Raúl Heras dirigió sus esfuerzos en plasmar las coincidencias de energías, ritmos y maneras se entender el movimiento dentro de cada disciplina.

Off Limits de la Guilda Obscénica (2017)

Con el lanzamiento de la primera bomba atómica como punto de partida argumental, ‘OffLimits’ exploró diversos lenguajes escénicos desde la danza contemporánea y  el flamenco, llevando ambos lenguajes más allá de sus propios límites con el rico trabajo coreográfico colaborativo de María Cabeza de Vaca y José Maldonado.

‘Impulsos’ de Rocío Molina (2019)

Una entregada a la creación Rocío Molina  presentó en Itálica 2019 un ciclo de tres ‘Impulsos’, propuestas de obras en construcción en las que la improvisación y el desarrollo creativo en directo fueron los principales ingredientes. La artista estuvo acompañada por el guitarrista Rafael Riqueni, en la primera sesión; por la coreógrafa Elena Córdoba y la violinista Luz Prado, en la segunda; y por el bailarín y artista multidisciplinar François Chaignaud y el músico Pablo Martín Caminero, en el tercero.

Yarín de Jon Maya y Andrés Marín (2021)

En este proyecto, Jon Maya y Andrés Marín decidieron unir su capacidad creativa en una experiencia con la que profundizan sobre los elementos comunes de la cultura de raíz vasca y flamenca. La confluencia de ambos universos era un deseo lejano de ambos creadores, que trabajaron ‘Yarín’ desde la autenticidad y la austeridad.